Pingu está saltando arriba y abajo en su cama, lo que hace que los platos se caigan y se rompan de un estante. La madre entra y le dice que se detenga y lo hace sentarse en una silla. Pingu luego salta arriba y abajo en la silla, casi asusta a Pinga, y por segunda vez se le dice que no rebote. ¡Pingu luego salta en un cojín y luego en el conejo de Pinga! La madre le quita el conejo a Pingu y se lo pasa a Pinga. El padre llega y se establece para leer el periódico. Él y Pingu construyen un trampolín improvisado, y rebotan en él. Cuando mamá llega a casa, Pingu cae de cabeza sobre la silla. Luego sacan el trampolín afuera y la madre se pone los cascos protectores. Pingu y papá hacen rebotar en ello.