Dos investigadores de asesinatos, los ambiciosos y carismáticos Rob Reilly (Killian Scott) y Cassie Maddox (Sarah Greene), tendrán que resolver dos crímenes. Las víctimas (una joven bailarina llena de talento que es encontrada muera en un antiguo altar de piedra, y una jovial y liberal mujer que ha sido apuñalada en una pequeña casa de campo sin techo) parecen no tener nada en común. Sin embargo, descubrirán que el desenlace de ambas está relacionado.