La calle Jesús Carrana es la que acoge más asesinatos de toda la ciudad y una de las zonas con más tráfico de droga. Durante los últimos años, los crímenes violentos han aumentado considerablemente, llegando a alcanzar una tasa de 12,31 por cada 100.000 habitantes, lo que lo convierte en una epidemia de violencia, según la ONU.